Se le atribuyen propiedades tonificantes, diuréticas, digestivas y afrodisíacas. En el caso del calçot se ha comprobado que tiene un contenido interesante en compuestos anticancerígenos. El diámetro del calçot puede llegar a hacer entre 1,7 y 2,5 centímetros y la pierna blanca entre 15 y 25 centímetros.
Los calçots fueron descubiertos de una manera casual por un labrador de Valls conocido con el renombre de Xat de Benaigues. Aunque esto pasó a finales del siglo XIX, no fue hasta principios del siglo XX que los calçots se convirtieron en una comida habitual de los días festivos de muchas familias de Valls. A partir de los años 40, el calçot fue conocido mas allá de los límites de la comarca del Alt Camp a través de las populares “calçotades”.
Valor nutricional: 40 calorías por cada 100 gramos.
Temporada: De octubre a marzo (al aire libre).
Sabías que… La “calçotada” es una especialidad única de la cocina rural catalana.